sábado, 8 de diciembre de 2018

BLANCO

   
I

   Es el hombre. El de la guitarra. Moreno, grueso, bajo de estatura. Aquel de la gorrita violeta. Pero para estar más seguro, me fijo en su brazo. No hay duda, el Cristo tatuado. Quién soy yo para cuestionarlo. 


II

   Es el hombre. El de las manzanas azucaradas. Moreno, grueso, bajo de estatura. Aquel de la gorrita verde. Pero para estar más seguro, me fijo en su brazo. No hay duda, el Cristo tatuado. Quién sabe qué habrá hecho. 



III


   Es el hombre. El del martillo. Moreno, grueso, bajo de estatura. Aquel de la gorrita amarilla. Pero para estar más seguro, me fijo en su brazo. No hay duda, el Cristo tatuado. Quién sabe con quién se metió. 


IV


   Es el hombre. El de anteojos. Moreno, grueso, bajo de estatura. Aquel de la gorrita blanca. Pero para estar más seguro, me fijo en su brazo. No hay duda, el Cristo tatuado. Quién sabe si lo esperarán esta noche en casa.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

DE CUANDO TODOMEO SABOREÓ EL PODER

       Tomaría una novela explicar cómo llegó Todomeo a ocupar el trono de la nación. Por ahora, basta decir que lo acompañó la ...